"Contrapunto" una pieza sorprendente

Por Lucrecia Abalos


La obra de Anthony Shaffer se evalúa con una cuota de intriga y otra de misterio. Dos actores increíbles, Leonardo Sbaraglia y Pepe Soriano, y un director de lujo, Agustín Alezzo hacen de "Contrapunto", una pieza sorprendente.

La humillación es el camino mas corto al corazón de un hombre, y aquí surge la primera pieza de este juego. Deshonrar, maltratar, ultrajar y ofender sin importar sus resultados. Andrew Wyke (Pepe Soriano), un escritor de cuentos policiales al que le gustan las adivinanzas y los juegos de enredo; Milo Tindle (Leonardo Sbaraglia), un actor casi frustrado que pretende a la mujer del escritor.

La escena transcurre en la casa de Wyke, una enorme mansión ubicada a lo alto
de la colina, en un pequeño pueblo al sur de Inglaterra. Tocan la puerta, y un
apuesto joven ingles se presenta con un propósito: encontrar una solución para
que se pueda casar con Maggie (la todavía esposa de Wyke), sin que a este le cueste una fortuna su divorcio. Uno toma vodka, otro whisky, y empiezan las negociaciones.

El viejo le propone al joven un robo insólito: que robe sus propias joyas así el seguro pague la indemnización y así se asegura que su ex esposa no lo va a molestar mas pidiéndole dinero. Al principio se niega pero tarda segundos en tentarse luego de escuchar el valor de las joyas. Simulan una escena del robo increíble, donde no faltan los golpes, el desorden para no obviar ningún detalle de un excelente robo.

Una tensión en la cuerda floja, es lo que hace al contrapunto en un pasaje musical. Y un reflejo fuera de control, puede complicarlo todo.
Explosiones en escena, tiros, muertes y similares, con risas y mucha ironía se oyen los aplausos. Una pieza lograda.


Contrapunto está de miércoles a domingo en el Multiteatro, Av. Corrientes 1283.